Compromiso de responsabilidad social voluntario: el código de conducta empresarial.
Hoy en día son pocos los que dudan de que la Responsabilidad Social Corporativa ha venido para quedarse. Los consumidores somos cada vez más conscientes del poder que tenemos sobre las compañías que nos ofrecen sus productos y servicios, ya que éstas temen perder nuestra confianza como consecuencia de los escándalos derivados de una mala gestión ética. Esta situación se traduce en un compromiso de las empresas por ser responsables y debe manifestarse en todos los niveles, desde las grandes decisiones estratégicas, hasta la actitud del último de sus empleados. ¿Cómo se articula esto?
Tal y como ya había sucedido antes en el ámbito de la calidad y el medio ambiente, diferentes organizaciones nacionales e internacionales han elaborado normas como la ISO 26000 (norma no certificable que sirve como guía) y estándares como SGE 21 o IQNet SR 10 que ayudan a integrar la Responsabilidad Social en los sistemas de gestión de las empresas. Uno de los requisitos necesarios para una correcta integración es la elaboración de un código de conducta, entendiendo éste como una guía de comportamiento responsable para todos los integrantes de una organización. Se trata de un documento voluntario, que la empresa decide seguir unilateralmente, pero que puede incluso ser aplicable a proveedores o subcontratistas si así se establece, multiplicando con ello el impacto de su implantación y cumplimiento.
Los sistemas de gestión de responsabilidad social, que lo exijan, deben disponer de un adecuado código de conducta apoyado por los máximos responsables de la entidad.
No existe un contenido obligatorio para su desarrollo, y es adaptable a cualquier tipo de empresa y entorno, pero podemos determinar que, en líneas generales, los aspectos habitualmente incluidos en los códigos se refieren a la lucha contra la corrupción, los derechos laborales, el respeto por el medio ambiente, los derechos humanos, las prácticas comerciales éticas, el respeto a la legislación vigente en cada país, etc.
El contenido mínimo que proponemos de un código de conducta es el siguiente:
- Mensaje del Presidente del Consejo de Administración o del Consejero Delegado de la organización.
- Identidad Corporativa: Misión, Visión y Valores.
- Objeto y alcance del código de conducta. Limitaciones y aplicación del mismo.
- Derechos de los Grupos de Interés.
- Normas de conducta internas.
- Plan de comunicación del código de conducta.
- Mecanismos y vías de contacto para consultas o denuncias.
- Mecanismos de seguimiento.
- Mecanismos de sanción.
Si quieres que tu empresa cuente con un código de conducta no dudes en contactar con CAVALA a través del correo electrónico info@cavala.es o a través del teléfono 915340407.
